Se ha descubierto una sala gigante que se cree que fue utilizada por un rey legendario famoso por estar enterrado en un ataúd de oro.
Los arqueólogos estaban excavando una tumba real en Seddin, en el estado de Brandeburgo, al noroeste de Berlín, cuando se encontraron con una enorme estructura de la Edad del Bronce. Una inspección más detallada determinó que data de entre 2200 y 800 a.C., según un comunicado del consejo del distrito de Prignitz.
El consejo dijo que el hallazgo indica que la región fue un centro de poder de la Edad del Bronce durante la época del legendario rey Hinz.
“Este es el edificio más grande de su tipo, sólo conocemos cuatro edificios de esta época en un período de 1.000 años que tengan esta amplitud”, dijo el arqueólogo principal del proyecto, Immo Heske, de la Universidad Georg-August de Göttingen. .
Una foto muestra el contorno del antiguo edificio descubierto en Seddin, Alemania. Los arqueólogos creen que fue utilizado por un rey legendario famoso por estar enterrado en un ataúd de oro. DISTRITO DE PRIGNITZ
Los arqueólogos creen que alguna vez pudo haber sido la sala de reuniones del rey Hinz, quien, según la leyenda local, fue enterrado en un ataúd de oro macizo. No se sabe mucho más sobre el legendario gobernante, lo que hace que este nuevo descubrimiento sea un hallazgo importante.
“Lo que aquí se presenta es realmente espectacular. Para encontrar algo así se necesita suerte, pero también es el resultado de una cooperación ejemplar a diferentes niveles”, afirmó Tobias Dünow, secretario de Estado del Ministerio de Ciencia, Investigación y Cultura de Brandeburgo.
Sólo se han descubierto un par de edificios más de la Edad del Bronce Nórdico que sean tan grandes como la estructura encontrada en el estado de Brandeburgo. Es muy probable que esta sala fuera un lugar de reunión de la realeza, aunque se necesitan más investigaciones para arrojar luz sobre su finalidad.
La sala tenía un piso que medía 102 pies por 33 pies. Hasta ahora, los arqueólogos creen que fue construido originalmente en algún momento de los siglos IX y X a.C.
Se estima que medía 22 pies de altura y estaba construido con tablas de madera y yeso de arcilla. Los arqueólogos descubrieron que se había tejido paja en el techo.
Se descubrió una gran chimenea dentro de la sala y los arqueólogos también desenterraron una vasija en miniatura asociada con fines rituales.
El descubrimiento se encuentra cerca de un enorme túmulo funerario donde se cree que fue enterrado el rey Hinz. El montículo, de 209 pies de diámetro, fue descubierto por primera vez en 1899 y está considerado uno de los más importantes de su época.